Ésta consiste en la incapacidad para pronunciar o formar correctamente ciertos fonemas o grupos de fonemas, lo que puede afectar a cualquier consonante o vocal, pero generalmente se da por una mayor incidencia del problema en ciertos sonidos; como ser: en la “r” porque requiere mayor agilidad y precisión de movimientos, en la letra “k” ya que la articulación no es visible y se puede hacer más difícil su imitación, y a veces porque existen sonidos, como la “s” y la “z”, por el sonido que se emite.
Esta dificultad es una de las anomalías del lenguaje que con más frecuencia se presenta en los centros escolares y, sobre todo, en el primer ciclo de primaria.
CAUSAS
Las causas son diversas por varios factores:
Falta de habilidad motora, retraso en el habla, en el sentido en que el niño no logra articular correctamente las palabras.
Falta de comprensión o discriminación auditiva, ya que hay niños que aun oyendo bien, integran mal los fonemas correctos, presentan dificultades para interpretar y discriminar los sonidos.
Factores psicológicos, debido a falta de cariño, afecto en la familia, celos entre hermanos, lo cual incide en el lenguaje del niño y esto impide a que evolucione adecuadamente.
Factores ambientales, es importante el entorno en el que el niño va adquiriendo habilidades y destrezas, ya que si se ve aspectos negativos, carencias en el ambiente familiar, cultural, etc., puede ocasionar ciertos retrasos en el habla.
Factores hereditarios, puede existir una predisposición al trastorno articulatorio que estará reforzado por la imitación de los errores que cometen los familiares al hablar.
CONSECUENCIAS
Si usted observa algunas de las características mencionadas anteriormente, debe tener en cuenta que es preciso tratarlas a tiempo, ya que, en lo posterior puede traer consecuencias muy negativas, tanto en el desenvolvimiento personal del niño, como en su rendimiento escolar; ocasionando que su interacción en el medio en la cual se desenvuelve será desfavorable y por esta razón también influirá en la autoestima.
TRATAMIENTO
El tratamiento debe ser realizado por un fonoaudiólogo,
de tal forma que aplique el procedimiento adecuado, con la ayuda de una variedad de juegos y mucha colaboración de la familia, con la finalidad de que el niño aprenda a articular los sonidos correctamente y sea capaz de comparar y diferenciar las vocales y consonantes. La terapia se centra en juegos que facilitan la adquisición de las habilidades necesarias. Requiere implicación y participación tanto del niño como de su familia, para que el proceso pueda ser seguido y complementado por ellos en casa.
El tratamiento consiste en ejercitar la musculatura que está interviniendo en la producción de los sonidos. La terapia se centra en juegos que facilitan la adquisición de las habilidades necesarias. Algunos juegos y ejercicios son tan sencillos como soplar un globo. Requiere implicación y participación tanto del niño(a) como también de su familia, para que el proceso pueda ser seguido y complementado por ellos en casa y, más aun, teniendo avances mucho mayores y factibles.
Es necesario tener en cuenta que cuando la causa del trastorno viene por malformaciones físicas se requerirá un procedimiento médico para ayudar al niño a que supere las dificultades en el desarrollo de las capacidades del habla.
No hay comentarios:
Publicar un comentario